¡Dejen el drama con las elecciones de EEUU!

 Por: Yoni Cruz

Yoni Cruz
Este martes 3 de noviembre, Estados Unidos elegirá un nuevo presidente. Se escoge entre el actual mandatario, Donald Trump, y el ex vicepresidente Joe Biden. Todas las encuestas indican que Biden supera a Trump entre 7 y 10 puntos porcentuales. Los expertos analistas no tienen certeza de que Trump esté totalmente derrotado, pues el sistema de elección presidencial de esa nación no escoge por voto directo a su presidente, sino por colegios, y aunque Biden sacará
más de tres millones de votos que Trump, si no reúne los 270 votos de colegios, no gana, como le pasó en 2016 a Hillary Clinton. ¡Vaya sistema más democrático, donde el presidente no es el resultado del voto mayoritario de sus ciudadanos! Pero bueno, ese es el modo que esa sociedad decidió.

De un tiempo a esta parte, es común ver a dominicanos que a lo más que llegan es a tener visa, y muchos ni siquiera han viajado alguna vez a ese país, enfrascarse en una defensa mordaz a candidatos estadounidenses, y fanatizarse como si fueran tan estadounidenses como cualquier gringo, especialmente los que defienden a Trump, que plantean la cuestión como si un cataclismo le llegará al mundo si este hombre no gana el 3 de noviembre. ¡Vaya usted a ver! La mayoría de los inmigrantes dominicanos residentes en Estados Unidos, naturalmente votan a los candidatos demócratas.

De hecho, los dominicanos que han escalado a posiciones electivas en ese país pertenecen al Partido Demócrata, no al Republicano. Y razones de sobra tienen para que la simpatía demócrata resulte mayoritaria entre nuestros hermanos residentes allí. La noticia es que, gane Biden o se reelija Trump, no se acabará el mundo, no habrá grandes cambios ni nos afectará de manera drástica como país. Nadie debe creerse el cuento de que lo que allí se debate es una lucha entre un partido socialista, comunista y un partido conservador, de derecha. Ambos partidos son sostenedores de un sistema, de un “stablishment” que en sentido general dirige un modelo de política que ve al resto del mundo como inferiores, parte de su colonia, del que solo le preocupa garantizar los intereses de esa clase poderosa.

Y eso no va a cambiar, porque igual que pasó en nuestro país al elegir al PRM y sacar el PLD, se está cambiando de un partido, no de un sistema, y por tanto, no es mucho lo que va a variar en términos de gobierno. Si usted es ciudadano estadounidense, vote, no pierda la oportunidad de ejercer su derecho a elegir al candidato que mejor entienda le garantiza sus intereses. No se exponga ni se deje llenar de odios, de violencia ni de discursos que solo traerán más desasosiego a la gente de abajo. Si usted no tiene derecho a votar allí, si apenas tiene una visa, o nunca siquiera ha visitado los “nuevayores”, cálmese, déjese duerma tranquilo, que usted no pinta nada en ese juego.

Si alguien me preguntara por quién votaría si tuviera derecho a hacerlo, naturalmente lo haría por Biden, como única contraparte a un hombre como Trump que ha demostrado en su vida y en su gestión que poco le importan los demás, las minorías y que enarbola ideas de división y odio. Pero como solo soy un expectador distante, solo puedo decirles a nuestros dominicanos republicanos pegados: ¡Dejen el drama! No desesperen, que todo lo definirán los que sí tienen derecho a elegir, y que el día 4 de noviembre, la Tierra seguirá girando, el mundo no se detendrá siquiera por un segundo.